Aranceles: Aunque el mercado descuenta que durante las próximas fechas EEUU podría anunciar diversos acuerdos comerciales, la tasa efectiva actual es cercana al 15% cuando en febrero era del 3,7%. La subida en la inflación será una de las consecuencias que pueda tener esta guerra arancelaria. Nosotros creemos que todavía las empresas no han repercutido todavía los precios a los consumidores, lo cual podría mostrar que los márgenes son más estrechos.
Resultados corporativos: Los analistas pronostican un crecimiento anual del 5,8% para el segundo trimestre, en comparación con el 13,7% del primer trimestre, según LSEG. La parálisis empresarial de este trimestre debido a las dudas sobre la política comercial de Donald Trump deberían de tener efecto en los ingresos de las compañías estadounidenses. Los beneficios después de impuestos representan un 10,7% del producto interior bruto. En los últimos 50 años nunca superaron el 8%, sólo acercándose en 1929.
Situación geopolítica: El fin de las hostilidades entre Israel e Irán ha hecho bajar los precios del petróleo, aliviando la preocupación de los inversores sobre cómo esto se reflejaba en la inflación. Aun así, el impulso a la confianza es frágil, mientras no descartamos que en cualquier momento puedan volver a aumentar las dudas sobre la relación entre EEUU y China, y la paz en Ucrania queda muy lejos.
Deuda: Los vigilantes de los bonos están en alerta. Estados Unidos recibió en mayo una rebaja sobre su calificación de la deuda, y se espera que el nuevo proyecto de ley añada billones de dólares, impulsando al alza la rentabilidad de los bonos. Japón puede ser el mejor ejemplo del problema que puede venir. El Gobierno no tiene capacidad real para pagar su deuda de manera productiva. La única forma en que puede pagar es a través de la impresión de dinero, lo que devaluará drásticamente el yen, e impulsará los bonos, generando importantes pérdidas a los tenedores actuales.
La Reserva Federal: Las posibles subidas en la inflación deberían maniatar al organismo presidido por Jerome Powell durante los próximos meses. La subida en los salarios, la debilidad del dólar, y la guerra arancelaria podrían empezar a mostrar repuntes en la inflación que limiten las decisiones de la FED, mientras el mercado espera al menos dos recortes de tipos.
Valoraciones y concentración: Con las acciones cotizando a 22 veces los beneficios en los próximos 12 meses, la valoración del S&P 500 está muy por encima de su promedio de 10 años de 18,6 veces. Mientras que el índice está en máximos, apenas el 22% de las empresas cotizan en esos niveles, lo cual habla sobre la fragilidad de esta tendencia que está apoyada en una serie de valores concretos.